El reflejo y la sombra

 

Amsterdam. Autor: Antón Fernández Ramírez

En un documental sobre hormigas mostraron por primera vez como se apartan del trabajo y descansan. El descanso suele ser una actividad individual, excepto en el ejercito que se descansa cuando el sargento dice "¡Descansen! ¡Arr!". Uno cuando se aparta en soledad es para recuperarse de la fatiga que supone formar parte de una bandada o del tráfago de la ciudad. Un ejercicio necesario de individualidad. 

La ciudad en la fotografía es una superposición de ángulos rectos: edificios, ventanas, barandillas, escalones, los barcos rectangulares... En el centro de la fotografía la luz cenital aumenta el contraste de las figuras del centro: la gaviota y el hombre. Hay algo extraño y es el diferente ángulo de la sombra que proyecta el poste en la que está posada la gaviota y la sombra que proyecta el hombre. Quizás sea porque lo que proyecta el poste sea el reflejo y lo que proyecta el hombre sea su sombra. Como siempre, lo más interesante es lo que no se cuenta a primera vista.